Tuesday, June 10, 2008

Tómbola

Si me hubieran concebido un segundo antes
o un segundo después
entonces no sería
yo.


¿Cómo se habrían juntado aquellos cromosomas?
¿A qué combinación habrían dado lugar?
¿Quién sería el resultado del teórico sorteo?


¿Cómo sería el no-yó
no engendrado
no creado
un segundo antes
o después de
mí?

16 comments:

NáN said...

¡ah! El azar (y la no-necesidad).

Un viajante de comercio estadounidense, fatigado, paró el coche y se sentó en un tronco caído a fumar un cigarrillo. Lo hizo sobre un grueso gusano que en su camino estaba en el sitio más apetecible para sentarse.

Como solo tenía otro par de pantalones, se detuvo en el pueblo siguiente, que no pertenecía a "su" ruta, para limpiarlo en la tintorería. Le encantó la amable tintorera y empezó a parar allí cada vez que pasaba.

Se casaron y tuvieron un hijo al que el señor Nixon puso de nombre Richard.

Por un gusano, un Presidente de los Estados Unidos.

¿A qué antepasado te habrías parecido por un segundo de más o de menos?

saiz said...

Así es, Nán. Somos resultado del azar y vivimos de "chiripa". Y, una vez que nacemos por designio de la suerte, nuestra vida es una continua sucesión de pasos azarosos, ya que cada decisión que tomamos abre la puerta a una serie imprevisible de alternativas.

Puede que por eso a muchas personas les atraigan los juegos de azar, las loterías y los sorteos... ya que, por muy aleatorios que resulten, nunca lo serán tanto como nosotros mismos.

Anonymous said...

La vida es una tómbola "-ton-ton-tómbola", como decía la canción, una tómbola en la que manda y ordena la diosa Fortuna, que es la más ciega de todas.

saiz said...

He oído esa canción, o por lo menos el estribillo. Hay otra canción que dice que "la suerte es como un pez". Al oírla me acordé de que en español tenemos una palabra, "Albur", que quiere decir suerte o azar (por eso decimos "dejar algo al albur"), y que en árabe significa "pez". Así que, ciertamente y como afirma esa canción, la suerte es imprevisible y escurridiza como un pez.

Anonymous said...

Es una pregunta muy repetida ¿por qué yo y no otro?.

Forma parte del misterio de la vida. El azar no es fruto de un capricho, de hecho hay personas que llevan buena ó mala suerte.

saiz said...

Gracias, Sandra. Yo creo que hay algo de eso. Se dice que "la suerte es para el que se la trabaja"; y que "la suerte es el cuidado de los detalles".

Evidentemente hay comportamientos que favorecen la buena suerte y otros que la repelen. Creo que un jugador de golf decía "Meter la bola en el hoyo depende de la suerte, pero lo curioso es que, cuanto más me entreno, más suerte tengo".

La suerte es, ciertamente, "atraída" por el esfuerzo y también por el saber aprovechar la casualidad y la oportunidad allí donde se presentan.

De todos modos, creo que esto no lo explica todo. Fíjate en cómo, a menudo, la mala suerte se ceba en las personas mejores e inocentes. La desgracia y el desastre recaen muchas veces en quienes (al menos a nuestros ojos) menos lo merecen: los pobres y desheredados de la tierra... ¿Qué han hecho ellos para atraer la mala suerte?

Anonymous said...

La suerte es como un pez
que de sus manos resbaló
como la pretensión
de ser algo que se esfumó.

Deambula por los puertos
suplicando tragos de favor.
Apostó su vida a un bello sueño
que era su dueño y voló.

Gira y gira el carrusel
pero siempre gira en contra de él.


La suerte es como un pez
que de sus manos resbaló
y como un plomo en el agua se hundió
y allí reposa con otras muchas suertes
que resbalaron como un pez.

8GABINETE CALIGARI)

Anonymous said...

El tema es complejo, y también muy interesante.

Si, todos tenemos responsabilidad en todo lo que ocurre en nuestra vida, pero cuesta tanto, tanto, tanto asumirlo. Topamos con nuestra propia naturaleza.

El universo tiene muchas leyes, una de ellas es la ley de la atracción, significa que todo lo que se concentra aumenta. El que tiene pensamientos de bondad atrae bondad. Si, ya se, hay personas buenas que tienen desdichas, hubiese que analizar que tipo de estructura mental tienen y como conceptúan la vida, nos dariamos cuenta que hay inmanente una idea de pobreza.

Nos mandan a este mundo sin un manual de instrucciones, pero una buena manera de ajustar velas en nuestro viaje es tener positividad (aunque somos carne humana)

Anonymous said...

RAZA leido al revés es AZAR... O sea que ser de una raza u otra (blanco , negro, amarillo, gitano...) ... es una cuestión de azar. Lo mismo pasa con todo lo demás . Vienes al mundo y puedes venir europeo o subsahariano, puedes nacer en un pais desarrollado o subdesarrolladio, en una familia rica o pobre. Puede ser que vengas en un pais del Tercer Munbdo pero te adopte una familia riquísima de un pais occidental (ahora mucha gente en España adopta niñas chinas). Casi todo (yo diría el 95%) es cuestion de suerte.

Anonymous said...

Un viejo granjero poseía un viejo caballo con el que trabajaba sus campos. Un día el caballo huyó a las colinas.

A los vecinos que le caían simpáticos, el viejo respondió “Suerte o mala suerte, quién puede decirlo”.

Una semana más tarde, el caballo volvió de las colinas con una manada de caballos salvajes, y los vecinos felicitaron al granjero por su buena suerte.

El respondió entonces: Suerte o mala suerte, quién puede decirlo.

Después, cuando su hijo, queriendo domar a uno de los caballos salvajes, se cayó y se rompió una pierna, todo el mundo creyó que era una gran mala suerte.

El granjero se contentó con decir: Suerte o mala suerte, quién puede decirlo.

Algunas semanas después, el ejército entró en el pueblo y movilizó a todos los jóvenes útiles. Cuando vieron que el hijo del granjero tenía rota la pierna, le excusaron de alistarse.

¿Buenas o mala suerte? ¿Quién puede decirlo?

(Todo lo que a primera vista parece malo, puede ser un disfraz. Y viceversa)

saiz said...

Muchas gracias por todas vuestras aportaciones, tan interesantes. Estoy asombrado, no suponía que la entrada pudiera dar para tanto.

Anonymous said...

Antes de la suerte está la decisión, como todo antes de la consecuencia tiene una causa. Pero ay como duele...

saiz said...

Gracias, Sandra. En todo caso, la suerte NO está echada. O sea, y como NO diría Julio César, "alea jacta NON est".

Ese juego de palabras entre CASUALIDAD Y CAUSALIDAD, ¿será casualidad? (Cuestión de dónde pongamos la u.)

Puede que la casualidad sea causal. El hecho de que (aún) no conozcamos qué ley superior nos guía no significa que no exista.

Hay un poema de Borges que dice algo así:

El vago azar o las precisas leyes
que rigen este mundo, el universo,
me permitieron recorrer un trecho
de mi camino con Alfonso Reyes.

¿Vago azar o precisas leyes? Quién sabe...

Anonymous said...

Hablando de suerte hay 13 comentarios, TRECE. Hay que hacer algo , por ejemplo añadir este ya que pueden dar muy mala suerte. Con este ya son 14. Ufffffffffff

Anonymous said...

lo de no engendrado y no creado me recuerda algo de la misa. ¿Es asi o son figuraciones mías?

saiz said...

Puede que, inconscientemente, sea así. Gracias por tu visita y comentario.