Wednesday, March 31, 2010

Madre Tierra

Primero hirviente y después enfriada.
Orbitante,
viajera,
giratoria,
sacudida por magmas,
glaciaciones,
seísmos,
erupciones,
meteoros
(como si persiguieras recordarnos dónde estamos
y de quién procedemos).
Bola igual que otras muchas y,
no obstante,
única zona fértil del desierto,
insólito jardín en el erial.
Oasis donde las rocas respiraron,
donde brotaron ojos y cerebros
desde el barro
sin saber para qué.
Inerte generadora de cuerpos,
arcillosa creadora de sentidos,
inconsciente hacedora de conciencias.
Tú seguirás aquí cuando no estemos.
Perdurarás más tiempo que nosotros, criaturas
de tu vientre mineral.
Superarás a tu insólita prole,
a la vida
-esa excrecencia rara,
el sarpullido de tu superficie-,
y aún después girarás como astro inhóspito.
Pero, con todo,
estás condenada a alguna vez salirte de tu eje
e ir a precipitarte
contra el centro
para ser digerida por la estrella.
Como tus hijos,
prolífica bola,
has de extinguirte en un punto del tiempo.
Como nosotros te irás,
madre Tierra,
sin saber la razón de tu existir.

Monday, March 29, 2010

Entre ellos

¿Cómo pasar por delante
de un puesto de libros
(libros nuevos o usados,
libros viejos o jóvenes)
sin parar a mirarlos,
a husmear entre sus páginas?
¿Cómo no cerciorarme
aunque sea por encima
de que uno de esos libros no es
el que me abduciría,
el que aboliría el dolor
y calmaría la sed,
el que me llenaría,
el que me haría feliz?
¿Cómo no constatar
que no está allí, entre ellos,
escondido entre ellos,
ese libro que existe
aunque aún no se haya escrito
o sí?
¿Cómo no comprobar
aunque sea fugazmente
que uno de esos libros no es
el libro de mi vida,
que escribió o va a escribir alguien
que me desconoce pero no me ignora;
el libro, justo el libro escrito
para mí?
¿Cómo?, ¿cómo pasar
ante un puesto de libros sin pararme a
mirarlos?

Monday, March 22, 2010

Se llama cráneo

La verdadera caja de los truenos,
la caja de la angustia,
del dolor,
del miedo,
del placer,
de la fatiga,
del odio,
del amor,
de la añoranza...
se llama cráneo. Prueba a abrirla y dentro
verás que habitan todos los relámpagos,
todos los truenos,
todas las tormentas.
La verdadera caja de los truenos no es una caja,
sino una cajita.
Es mucho más pequeña que una nube,
que una roca,
que una duna,
que un árbol...
La verdadera caja de los truenos es menor
que lo que cabe ahí dentro.
El interior supera a su contorno,
el contenido excede al recipiente.
La verdadera caja de los truenos es
tan pequeña que no puede ser
que en ella quepan
tantas tempestades.

Monday, March 15, 2010

Nuestra pequeña suerte

Qué suerte que el dolor
se alivie
Que suerte que los recuerdos
se borren
Qué suerte que la sangre
se coagule
Qué suerte que las lágrimas
se sequen
Qué suerte que las heridas
cicatricen
Qué suerte que haya
remanso
tregua
encaje
olvido
Qué suerte
En medio de lo adverso
y de lo fatal
qué suerte

Tuesday, March 09, 2010

Queriendo escapar

Pretendiendo escapar del dolor,
de la mutilación,
de las heridas,
pretendiendo escapar del gran monstruo,
del devorador ogro que nos sigue,
queriendo huir de él
pero no pudiendo,
con las piernas acorchadas y flojas
(ese sueño común de los humanos,
ése que tantas noches nos visita:
algo que nos persigue y
nos alcanza porque de pronto los pies no responden,
tus pies se han vuelto lentos y pesados,
tan torpes que ahora no saben correr…),
fuimos así escapando
trecho a trecho
hasta que entendimos que era imposible,
que no había forma de esquivar sus garras,
y entonces ya dejamos de huir
(-Cobra tu presa, monstruo; dame alcance).
Entonces finalmente
lo asumimos.

Monday, March 08, 2010

Adónde va

Intento ver mi yo de otro tiempo y veo
a un hombre extraño que camina.
Creo que no me suena de nada.
Me parece que no lo he visto antes.
Si alguna vez me crucé con él,
es probable que no me fijase.
Ni yo sé nada de lo que piensa,
ni él sabe nada de lo que soy.
Veo a un desconocido que camina,
a un perfecto extraño que se interna por calles
sinuosas y alargadas.
Se aleja por ellas y se pierde.
Ya sólo veo su espalda y su sombra.
No sé adónde irá, pero está claro que
en modo alguno viene
hacia mí.

Friday, March 05, 2010

Al menos

si al jugar a la vida todo valiera
al menos
tanto como nos cuesta

si nos fuera dado
al menos
lo mismo que se nos pide

si los logros estuvieran
al menos
al nivel del esfuerzo que requieren

si el terreno de juego
al menos
no estuviera dispuesto cuesta arriba

si la adversidad fuera
al menos
de nuestra misma estatura

si el arbitraje
al menos
no fuera injusto y parcial

…entonces
al menos
no perderíamos siempre

entonces
al menos
podríamos empatar
el partido

Wednesday, March 03, 2010

En el error

¿Alegría de salir del error?:
de entrar en la verdad y saber
que arriba no hay un cielo sino material cósmico,
que abajo no hay infierno sino núcleo terrestre,
que la tierra es esférica y no plana,
que no está en el centro, que el centro es el sol,
que la sangre se mueve por el cuerpo,
que enfermamos por virus y bacterias
-y no por castigo de un dios enojado-,
que no nos expulsaron de ningún paraíso,
que surgimos de un simio al que creció el cerebro…
¿Alegría de escapar del error?
Debería haber causado alegría,
-euforia de salir del error,
gozo por abrazar la verdad,
albricias por saber y entender-,
y no:
lo que la historia nos refiere es
que intentaron callar,
ocultar,
resistirse a salir del error,
que muchos preferían seguir instalados allí,
en lo falso,
en la ignorancia,
en el engaño,
y que al oír la verdad no hubo alegría
sino, más bien,
contrariedad y rabia.

Monday, March 01, 2010

Resistiremos

Tenemos escondidos depósitos de fuerza,
reservas ocultas en rincones ignorados,
en sitios donde nunca se nos habría ocurrido albergar un residuo
de energía de repuesto.
Pero si un día incluso esas reservas se agotan,
¿de dónde sacaremos la fuerza necesaria para seguir andando,
para no sucumbir?
Sacaremos la fuerza del completo vacío:
de donde no haya nada,
de donde ya no quede.
Y si a ello se oponen los designios de la física
(como si no bastaran los de la adversidad),
sacaremos la fuerza del calor que desprenda nuestra piel cuando arda.
Sí: de ahí la sacaremos.