Friday, July 20, 2007

Talión

Ojo por ojo,
diente por diente,
vesícula por vesícula,
páncreas por páncreas...

Y cuando arranquemos los brazos
de desmembrar,
nos los pondremos de plástico
para seguir
descuartizándonos.

1 comment:

Anonymous said...

Sansón fue más lejos cuando, cegado y atado a dos columnas, pidió a su dios que le devolviera la fueza unos minutos para matar a miles de palestinos "en venganza por uno solo de mis ojos".

Y es que hay quien se valora demasiado y crea las tragedias.