Ayer fui al cementerio en que enterré mis anhelos
y a uno de ellos le dije
(así por decir algo)
Levántate y anda.
Y el yacente fue y
para mi sorpresa
saludó se irguió y se puso a andar
¿A cuántos más habré sepultado a destiempo?
¿Cuántos otros afanes habré enterrado vivos?
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2 comments:
¿A cuántos de ellos podrías despertar con ese simple par de imperativos?
Hola, C. Gracias por tu comentario. En cuanto a lo que dices, está claro que muchas veces tenemos que hablarnos en imperativo. En imperativo categórico, para hacernos (auto-)obedecer.
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