Friday, May 16, 2008

¿Cómo van a llegar?

¿Cómo van a llegar
las palabras
donde a veces se adentra
la música,
siendo sólo unos roces
de dientes,
de garganta,
de lengua,
de labios...?

¿Cómo van a llegar
más adentro?

10 comments:

Anonymous said...

Paroles, paroles...

Son como el vino, su apariencia es la forma, la esencia, su espiritu está oculto.

saiz said...

Las palabras surgieron seguramente como un instrumento o herramienta, fundamentalmente para cazar, es decir, para comunicarse en una actividad práctica y material.

Otras formas de comunicación no nacieron así. Por ejemplo, cuando los hombres prehistóricos pintaban en las cuevas era para crear algo, con un sentido estético y expresivo. Lo mismo puede decirse de la música o la danza primitivas. O sea, que estos últimos medios sí surgieron para expresar sentimientos: alegría, tristeza, dolor...

La finalidad inicial del lenguaje no era expresar sentimientos, y aunque ahora intentemos "estirarlo" para esta finalidad, lo cierto es que no parece dar mucho de sí.

(Gracias por tu comentario.)

Anonymous said...

El lenguaje es ciertamente una caja de herramientas con la que dibujamos el universo de nuestra vida. Todas las ciencias tienen su lenguaje, lo importante es estar abiertos a aprenderlo, esa es la dimensión de la inteligencia: ¿verdad que hay palabras que construyen, otras deprimen, palabras que injurian y otras que abrazan?

saiz said...

Desde luego, hablar es traducir: traducir la realidad a palabras. Aunque no siempre es posible poner en palabras lo que sentimos.

Por lo demás, las palabras pueden ser hirientes y dañinas, tanto o más que los hechos. Hay palabras-arma, palabras-bala, palabras-misil...

Y está también (o sobre todo) el tono: la entonación con que se dicen las palabras (el tono de afecto, o de ánimo, o de burla, o de enfado, o de despecho...), esa entonación que surge de dentro, que exterioriza la intención profunda de quien habla.

Ese tono no puede escribirse porque no se han inventado signos ortográficos para ello, pero generalmente expresa mucho más que la palabra misma.

Anonymous said...

Si, ciertamente...

Hay muchos lenguajes, la expresión oral es solo uno. Hay un lenguaje visual, acústico, kinésico... La comunicación es un concepto muy amplio, donde la palabra es solo una parte pequeña.

Incluso las sensaciones que se basan en una recepción perceptiva tienen una transmisión signica, de donde elaboramos un sentimiento a partir de un pensamiento. Hablamos con gestos, con caricias, con miradas, con actitudes y sentimos de la misma manera. Bueno, que rollo sin venir a cuento, vaya la profesión por delante.

saiz said...

No me parece ningún rollo. Por el contrario, lo encuentro muy interesante.

El lenguaje gestual está tan integrado en nosotros que muchas personas, cuando hablamos por teléfono, movemos los brazos, las manos, gesticulamos... como si nuestro interlocutor pudiera vernos. Actualmente, con la telefonía móvil esto me resulta llamativo, pues puede verse a mucha gente por la calle hablando por el móvil y, al mismo tiempo, haciendo gestos y movimientos corporales elocuentes.

En cuanto al tono, es en cierto modo el lenguaje universal (no sólo humano). Si tienes un perro o un gato, da igual lo que le digas. Si le dices algo con tono cariñoso, el animal entenderá que es expresión de afecto. Y al contrario: puedes decirle "guapo, bonito"... con tono de enfado y te aseguro que captará la negatividad del mensaje.

Lo mismo puede afirmarse de los bebés que aún no han aprendido a hablar. No conocen la lengua verbal pero sí la gestual y la tonal.

Gracias por tu comentario.

(Insisto: todo lo que dices me parece muy interesante. Y lo mío no es deformación profesional: simplemente me atraen estos temas.)

Gemma said...

Pues gracias a los dos.
¡Menudo debate os habéis montado!

Saludos afectuosos

saiz said...

Gracias, Mega.

Siguiendo con lo anterior, en el habla coloquial es muy frecuente que una misma palabra (creo que todos ltenemos "in mente" algunos ejemplos), dicha con un tono o con otro, pueda ser un insulto o un elogio.

Anonymous said...

También hay un contexto cultural.
Los latinos gesticulamos mucho. Dicen "por el calor", cuanto más al sur, la gente es más expresiva, "más cálida". Al contenido sajón le sorprende el acercamiento mediterraneo, y viceversa. Aunque con la globalización creo que pronto imperará el individualismo.

Lo que si es diferente es nuestro mundo occidental, exterior, que no ha cultivado la razón humana. El prodigioso avance técnico ha descuidado nuestro propio conocimiento, y la relación más importante de nuestra vida, que es la de nosotros con nosotros mismos. La palabra no vale nada en nuestro mundo, y sin embargo es lo más importante para el ser humano. Es dificil hacer entender esto, y muy triste como se denigra este aspecto.

En relación a los tonos es cierto. Me llama la atención como se usa "gordi" como apelativo cariñoso, y sin embargo tiene una connotación ofensiva en otros ambitos, incluso familiares. También el cinismo, como proyección social, un recurso sacado de la oratoria, usado por las personas inteligentes como mecanismo de respuesta educado. En algunas personas es casi imperceptible el tono. Hay personas que cuesta mucho conocerlas.

saiz said...

Muchas gracias por tu aportación, llena de interés. A mí los acentos latinoamericanos me encantan. Me fascina especialmente el diminutivo-afectivo en los adverbios: lueguito, ahorita, etc. Me gusta también la conjugación argentina de los verbos, y el uso del pronombre "vos". Los textos de Cortázar tienen un encanto especial, en parte, por este motivo. Me gusta, en general, oír hablar a los latinos: decir la misma letra (o casi) pero con distinta música.